En el séptimo día de este desafío,
reflexionemos sobre la importancia de la humildad en la oración. La historia de
Daniel nos recuerda que, al acercarnos a Dios en oración, es fundamental
reconocer nuestra dependencia de Él y su soberanía en todas las cosas. La
humildad nos abre a la guía divina y nos permite experimentar su poder
transformador en nuestras vidas.
Al reconocer nuestra necesidad de Dios,
abrimos nuestro corazón para recibir su dirección y respuesta. La humildad nos libera
del orgullo y nos acerca a su gracia. A través de la humildad, reconocemos que
Dios es el centro de nuestras vidas y que su voluntad es lo más importante.
“Humillaos delante del Señor, y él os
exaltará” - Santiago 4:10 nos insta a humillarnos delante del Señor,
prometiendo que Él nos levantará. Esta Escritura nos recuerda que cuando
reconocemos nuestra dependencia y nos sometemos a la voluntad de Dios, Él nos
eleva y nos guía en su camino.
🙏 Entonces, con fe y humildad oremos:
Querido Padre celestial, en este séptimo
día de mi desafío de oración, me humillo delante de ti. Reconozco mi necesidad
profunda de tu dirección y respuesta en mi vida. En medio de mis aspiraciones y
anhelos, reconozco que tú eres el soberano sobre todas las cosas.
Enséñame, Señor, a depender de ti en
todas las áreas de mi vida. Que mi voluntad se alinee con la tuya y que busque
tu dirección en cada paso que doy. Ayúdame a rendirme ante tu sabiduría y a
confiar en tu plan perfecto, aunque no siempre lo comprenda.
A medida que me humillo delante de ti,
permíteme experimentar tu gracia transformadora. Que cada día de este desafío
sea un recordatorio de que tú eres el centro de mi vida y que tu voluntad es lo
que busco y persigo. Que mi humildad sea un reflejo de mi amor y reverencia
hacia ti.
Gracias, Señor, por aceptarme en tu
presencia con humildad. Que mi búsqueda constante de ti me acerque más a tu
corazón y me permita experimentar la plenitud de tu amor y gracia. En el nombre
de Jesús, amén.
Mientras te humillas delante de Dios en
oración, recuerda que Él está siempre dispuesto a escucharte y guiarte. Mantén
tu corazón humilde y receptivo a su dirección, confiando en que Él te exaltará
en su tiempo perfecto. ¡Continúa avanzando en tu desafío de oración con humildad
y devoción!
🙏 LEER EL DÍA 6:
¡Comparte tu petición y tu respuesta divina en este desafío!
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