A menudo, las dificultades de la vida nos hacen
cuestionar nuestra fe y propósito. Pero, ¿y si esas pruebas no fueran meros
obstáculos, sino herramientas divinas para moldearnos en algo extraordinario?
Dios no desperdicia el sufrimiento; lo usa para afilar nuestras habilidades,
fortalecer nuestra fe y prepararnos para grandes cosas que sólo pueden lograrse
a través de Su poder.
La Biblia está llena de ejemplos de hombres y mujeres que
fueron forjados en el fuego de las pruebas y, como resultado, hicieron cosas
extraordinarias para Dios. José, por ejemplo, fue traicionado por sus hermanos,
vendido como esclavo y encarcelado injustamente. Sin embargo, todo eso fue
parte del plan de Dios para elevarlo a la posición de segundo en mando en
Egipto, salvando así a muchas vidas en tiempo de hambruna.
"Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo." Génesis 50:20
Asimismo, el apóstol Pablo sufrió innumerables
dificultades por predicar el evangelio. Fue azotado, apedreado, naufragó varias
veces y enfrentó peligros a cada paso. Pero, en lugar de desanimarse, Pablo
entendió que su sufrimiento no era en vano. Las pruebas que enfrentó lo
prepararon para ser un testigo incansable de Cristo y llevar el evangelio a los
confines del mundo.
"Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria." 2 Corintios 4:17.
Cuando estamos en medio del sufrimiento, es difícil ver
el propósito detrás de las dificultades. Pero Dios nos asegura que Él tiene un
plan y que las pruebas que enfrentamos están moldeándonos para algo mucho más
grande de lo que podemos imaginar.
"Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados." Romanos 8:28.
Dios te está preparando para algo extraordinario. No te
rindas en medio de las dificultades; más bien, confía en que el Maestro
Alfarero está moldeando tu vida para un propósito divino. Cada desafío que
enfrentas es una oportunidad para crecer en fe y ser un instrumento poderoso en
las manos de Dios. ¿Estás listo para aceptar el llamado? ¡Permite que las
dificultades te transformen y prepárate para hacer cosas extraordinarias por
Él!
📌 LEER TAMBIÉN: El orgullo es un veneno silencioso que puede infiltrarse en nuestras vidas sin que nos demos cuenta
FACEBOOK | INSTAGRAM | TWITTER | PINTEREST | YOUTUBE | TIKTOK