Una expresión de amor y reconciliación que sobrepasó toda expectativa.
El domingo 3 de
agosto de 2025, miles cristianos en Colombia, se congregaron
en una jornada de adoración masiva: la Gran Marcha Nacional por Jesús. Lo que
comenzó como un acto de fe, terminó siendo una poderosa manifestación de unidad
espiritual a cielo abierto, con momentos de oración, canto y alabanza desde el
Parque Nacional hasta la Plaza de Bolívar en Bogotá, y miles de recorridos
simultáneos en decenas de ciudades del país.
Una sola voz para
alabar y orar
La marcha se planeó como un evento puramente espiritual, sin fines políticos ni eclesiásticos. Los organizadores enfatizaron que no se permitiría ninguna forma de proselitismo ni críticas al gobierno, manteniendo vivo el lema:
«adorar, alabar y orar». Esta convicción permitió que el mensaje fuera claro: Jesús es la esperanza de Colombia, y la unidad era el puente para proclamarse públicamente.
Bogotá: epicentro
de esperanza y reconciliación
En la capital la marcha comenzó a la 1:00 p.m. desde el Parque Nacional y culminó aproximadamente a las 2:00 p.m. en la Plaza de Bolívar, donde líderes cristianos de distintas denominaciones prendieron la llama de fe en lo alto.
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En
medio de cánticos, oración y mensajes de reconciliación nacional, creyentes
de todas las edades caminaron con camisetas blancas, banderas de Colombia y
tambores de alabanza, llenando el corazón de la ciudad.
El país respondió:
Medellín, Cali, Barranquilla, Cartagena y más
La marcha tuvo una réplica simultánea en Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Villavicencio, Cúcuta y otras ciudades, con trayectos que iniciaron desde puntos emblemáticos y llegaron a plazas donde hubo espacios de adoración y oración.
Cartagena se
vistió de fe pese a la lluvia: cientos se reunieron el 3 de agosto para caminar
por la avenida Pedro de Heredia mostrando pancartas como “Jesucristo es la
esperanza de Colombia” y expresiones de adoración marcadas por la música, la
danza y la gratitud.
Una historia que ya
está cambiando Colombia
La convocatoria al evento recuerda el éxito del año pasado (más de 2 millones en todo el país) y esta vez superó toda expectativa. Más allá de números, lo que impacta es la respuesta: personas de fe caminando juntas como una sola iglesia nacional.
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Pastores confirman que muchos asistentes fueron familias, jóvenes, niños y
adultos mayores expresando públicamente su confianza en Jesús como Señor de
Colombia.
Cuando la unidad
avanza, Dios se mueve
En una sociedad
fragmentada por diferencias culturales, políticas y sociales, esta marcha fue
un símbolo: una sola nación unida por una sola fe. No fue un evento efímero,
sino un acto de esperanza, un acto colectivo que proclamó que, aunque unidos
por denominaciones diferentes, el destino es el mismo: amar, servir y proclamar
a Cristo.
Te invitamos a que:
🙏 Recuerdes este día
en oración, por quienes se unieron en este acto público de fe.
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comunidad, en tu iglesia, y en tus redes.
🌱 Cada semilla, por
muy pequeña que parezca, se convierta en avivamiento.
🔥 Porque cuando
millones exhalan un solo cántico de fe, el cielo baja y la nación se
transforma.
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La plaza totalmente llena ¡Bogotá marchó para Jesús!
— Clara Lucía Sandoval (@clarasandoval) August 3, 2025
Un pueblo unido en un solo clamor, que Cristo sea exaltado en nuestra ciudad y país. Hoy más que una marcha fue una declaración de fe, amor y esperanza.#MarchaParaJesús pic.twitter.com/AjqFmoFYEn